Dinamarca no participó con unidades militares de combate, pero hizo una valiosa contribución humanitaria al enviar el buque hospital MS Jutlandia a Corea en 1951. El barco fue equipado con quirófanos, camas y personal médico altamente capacitado.
El MS Jutlandia atendió tanto a soldados de las fuerzas de la ONU como a civiles surcoreanos, ganándose el respeto y agradecimiento de la población local. Fue uno de los primeros ejemplos de ayuda humanitaria en un conflicto moderno.
La labor danesa simbolizó el compromiso con los derechos humanos y la asistencia médica neutral, valores que hoy siguen guiando la política exterior de Dinamarca.